La gasificación expone los desechos a un ambiente de alta temperatura para descomponerlos en sus componentes constituyentes; donde las moléculas más grandes, como los plásticos, se descomponen por completo en gas de síntesis, que se puede limpiar y procesar antes de cualquier uso posterior

El sistema CTEC funciona a temperaturas mucho más altas que los procesos de incineración estándar, lo que significa que una mayor parte de los desechos se convierte en energía, además de reducir significativamente los niveles de emisión de toxinas.

El proceso CTEC no genera dioxinas y furanos tóxicos a diferencia de los incineradores tradicionales.

Los sistemas CTEC son completamente modulares, diseñados para instalarse cerca de fuentes de desechos, como en un sitio hospitalario.